miércoles, 6 de octubre de 2010

Una vida de gestos.

Francisco Mouat.-


[...] Touraine habla del valor sagrado de los gestos privados, de todo aquello que hacemos libremente, sin presiones, sin que nadie nos esté mirando ni vigilando ni controlando. Y de cómo esos gestos pueden marcarnos a fuego. El valor del ejemplo. El irreemplazable valor del testimonio de vida. Un amigo sabio dice que lo que te define a ti mismo es lo que haces cuando nadie te ve. Es en esas tierras donde te comportas tal como te nace, es allí donde te vistes o desvistes sin protocolo, donde no estás obligado a tener vida social y prefieres la vida con los amigos, con los que quieres, sin ataduras. En tu república privada no estás obligado a ser políticamente correcto, no gastas energía en decir lo que hay que decir para estar bien con Dios y con el diablo. Tienes permiso para sentir cólera, para llorar de emoción, para golpear la mesa, para sonreírle :D a todo lo que te gusta sin complejos. También para ser mezquino y darte cuenta de que la mezquindad forma parte de la existencia humana.


[...]

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hay quienes dicen que somos lo que comemos. Otros, que somos según donde vivimos. La verdad es que somos lo que somos. Aquí, allá, en el norte o en el sur. Simplemente, somos lo que somos.