. Quince minutos .

Tengo quince minutos para decir mil cosas, y renovarle lalicencia a este blog que esta abandonado de su suerte y de su amor.
Tengo quince minutos, deberían ser diez porque debo lavarme los dientes, ponerme el poleron, y esas cosas antes de salir.
Tengo quince minutos y los desperdicio diciendo una tracalada de cosas que no deberían llegar a ningún oído, ojo o mano.
Si me quedasen quince minutos de vida, no estaría acá, no estaría sola, no estaría vestida provablemente, no estaría sentada, no estaría...
Sería con un cuadro una estrella y me fugaría por los patios del internado. Saltaría las barrerar que me he puesto, pintaría un cuadro en colores y otro enblanco y negro. Compraría una residencia en estados unidos para dejarla en herencia a mis herederos no cosanguíneos.
Si tuviera quince minutos dejaría de preocuparme por mi ortografía y me preocuparía más de tu geografía, estacionaría mi auto en una de tus curbas y me escondería en tus sombras. Entraría en tu cabeza para recordarme lo que olvide, para entender lo que no he entendido. A tu boca le daría un beso y me la guardaría por la eternidad. Caminaría entre tus ojos y que sientas como mi manos pintan en tu cara un ocaso maravilloso. Empuñaría tus manos alrededor de mi cuerpo para sentir que me abrazas una vez más. Me acurrucaría en tu cintura, bailaría en tus caderas y cuando me quedan cinco minutos me hundiría en la angunstia de no volerte a ver lloraría entre tus piernas, rogaría a Venus por dedicarte mi vida entera y perdería mi último hálito de vida entre el cielo y la tierra, sobre tu piel inóspita a la que extrañaré cada día de mi inexistencia.