La última persona que entró a este blog fui yo mismas hace unos días. Estaba buscando-me. Esperaba encontrar entre tantas letras algún signo, por muy infimo que fuere, de aquella persona que he sido, que había sido hasta unos años.
No lo encontré porque ya no existe. Y cuán orgullosa me siento de eso, ahora que lo pienso. Revisé entradas de hace un año, tres años, cinco años. Y siento que crecí. No de estatura, pero no es algo que me imoprte. crecí y me veo siendo tonta, sintiéndome como una estúpida, pensado que lo soy y sin hacer nada al respecto.
Me veo siendo infantil e hiriendo a otras personas. Me veo siendo herida y no decirle a nadie. Me veo y no entiendo nada.
Qué tonta.
No tengo certeza de que alguien te venga a leer, Macarena. Espero que no.
Te pido disculpas y te disculpo y con eso me desligo del pasado. Mi presente está muy llenito de amor, felicidad y honestidad como para hacerle a un lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario